viernes, mayo 21, 2010

DOLIENTE


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Pasaron demasiados momentos.

Una siesta de temores y dudas,
pasión que atiza el movimiento,
carmín, violetas, silencio.

Ilusiones templadas con el diapasón del tiempo
miradas, noches en vela meciendo sueños.

Atardeceres de espera
sin la ternura de antaño.
Alguna remisión del pasado,
un sí que tenía implícito otra ventana de afecto.

Garabatos en paredes,
trenzas, zapatos nuevos, lecciones de vida.

Pañuelos blancos, plazas, miedos.
Ladrillos y arena
y volver con más que nada,
cuerpos vacíos.

El colorado húmedo,
helecho, perfume a monte.
Luto sin regazo.

Pasaron tantas noches
sin palabra, pasaron
los niños, las mujeres,
la puerta del regreso
y bajo promesa, más que desierta,
olvidaste cuánto doliente has derramado.

Alguien merece eso?


©Elisabet Cincotta

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